La extracción de las muelas del juicio preocupa, y con razón, a muchas personas que sufren dolores o problemas en la boca a raíz del poco espacio que tienen para albergar esos últimos dientes de la mandíbula. Estas muelas, las más posteriores de la boca, salen alrededor de los veinte años de edad… pero a veces no llegan a salir, o no pueden hacerlo por falta de espacio. Eso puede provocar infecciones a causa de la dificultad para su limpieza o puede provocar una des-alineación de los dientes a raíz de la presión que pueden ejercer. Ante estos problemas, ¿cuándo y cómo deberíamos extraer las muelas del juicio?
Siempre hay que consultar a nuestro dentista especialista para saber con exactitud cual es el procedimiento a seguir para una determinada patología. Sin embargo, resulta evidente que, tratándose de una operación sencilla, es recomendable quitar las muelas del juicio si se sienten molestias a raíz de su aparición o si se han generado caries o inflamaciones.
Las muelas del juicio se pueden extraer aún cuando no hayan salido del todo, por lo que desde una temprana edad podríamos solucionar ese problema. En caso de edades más avanzadas, no debería de haber ningún contratiempo para poder quitarlas de la boca; es más, muchas veces es lo más recomendable.
¿Cómo es la operación para extraer una muela del juicio?
Tras una anestesia local, el dentista procederá a extraer las muelas del juicio. Existen varios métodos para extraer una muela del juicio: si el diente está a la vista, se ampliará el área donde se encuentra la muela para que esta pierda fuerza y se pueda retirar con más facilidad. En aquellas situaciones donde la muela no esté tan al alcance, se deberá hacer una incisión en la encía para poder sacarla sin más complicaciones. En según que casos, puede ser que se deba retirar parte del hueso de la mandíbula.
Una vez realizada la intervención, se colocarán unos puntos de sutura para que la herida cierre con absoluta normalidad. Estos se podrán retirar al cabo de unos 7 días en la misma consulta.
¿Cómo es la operación para extraer una muela del juicio?
Tras una anestesia local, el dentista procederá a extraer las muelas del juicio. Existen varios métodos para extraer una muela del juicio: si el diente está a la vista, se ampliará el área donde se encuentra la muela para que esta pierda fuerza y se pueda retirar con más facilidad. En aquellas situaciones donde la muela no esté tan al alcance, se deberá hacer una incisión en la encía para poder sacarla sin más complicaciones. En según que casos, puede ser que se deba retirar parte del hueso de la mandíbula.
Una vez realizada la intervención, se colocarán unos puntos de sutura para que la herida cierre con absoluta normalidad. Estos se podrán retirar al cabo de unos 7 días en la misma consulta.
Cuidados post-operatorios de una muela del juicio
Una vez se haya realizado la intervención, debemos tener presente que la sedación seguirá presente en nuestra boca durante unas horas más. Es por ello que deberemos ir con sumo cuidado para no mordernos el labio, puesto que nos podríamos hacer bastante daño. Otro de los elementos a tener en cuenta es el sangrado que se seguirá produciendo en la herida; para subsanarlo, deberemos taparla con algodón durante las horas posteriores a la extracción de las muelas del juicio.
Es normal que la boca se pueda llenar de sangre debido a la apertura de la herida. En ese sentido, debemos tener presente que es importante no escupir o enjuagarse, puesto que eso retardaría el cierre de la herida. Con paciencia se cortará el flujo de sangre y tendremos la boca en plenas condiciones en unas pocas horas.
Puede ser que suframos algunos dolores o molestias, por lo que la ingesta de analgésicos puede ser más que recomendable. Igualmente, en algunos casos, se recomiendan antibióticos para asegurar que la herida no se infecte. Pese a que en las primeras horas es recomendable comer líquido, en unos pocos días podremos ingerir alimentos con absoluta normalidad.
¿Tienes más dudas acerca de las muelas del juicio?